confesión

Hoy la depresión de nuevo se ha apoderado de mí.
Dicen en mí casa que no hago más que hablar de cosas tristes...
que voy a hacer si siempre digo lo que pienso,
si siempre digo lo que veo, lo que vivo, lo que pasa a mi alrededor..
Mi rutina es mirar atrás y lamentarme que las cosas no han ido como planeaba,
si después de todo Dios siempre se ha reido de todos los planes, no solo de los míos.
Intento cambiar, salir de esta oxidada cárcel, pero necesito una mano,
aunque sea tan pequeña como la patita de un pequeño perro.
y mi perro ya no está, me hago el fuerte, pero eso no se supera.
No tengo nada, olas de amargura golpean mi cara y yo tirado en alta mar,
soñando con pasar al otro mundo, a ese mundo tan profundo que hay cuando me hundo,
pero aún no se bucear, no he logrado tener tiempo para echar sueños a volar.
Que me escape!...todos quieres que me salga de aquí..me dicen que lo deje.
pero nadie dice nada más que eso y como todos saben las palabras se las lleva el viento,
aquí en Coruña hace mucho viento...lo demás todo es silencio.
Me levanto con los ojos pegados de migrañas,
sufro para compaginar trabajo con lagañas
España mi vida empaña y solo el amor es mi telaraña,
cuento las horas día tras día para llegar a mi cama,
y mientras mato el tiempo
siendo el  asesino de moscas y arañas.
Dejaré que el tiempo pase, me queda poco en el convento.
y mientras tanto veré a ver que coño invento.
para seguir sacando aliento
para volver a ser aquel, que le apodaban "el tipo más contento"
saludos para mí y para tí. que somos solo tú y yo.